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La relevancia del lenguaje claro en las pericias judiciales
Con los principios Constitucionales y la Declaración Universal de los Derechos Humanos, se argumenta que el uso del lenguaje claro es esencial para garantizar los derechos de igualdad, comprensión y acceso a la justicia. Se resalta la necesidad de equilibrar el uso del lenguaje técnico con la claridad para que los informes sean accesibles tanto a los profesionales como a los ciudadanos.
El lenguaje es la herramienta mediante la cual capturamos y describimos el mundo. Según Fernando Lázaro Carreter, la pobreza del lenguaje conlleva la pobreza del pensamiento. En el ámbito judicial, donde los informes periciales tienen un rol crucial, la complejidad del lenguaje técnico no puede ser una barrera para el entendimiento y la justicia. Si bien cada disciplina tiene su propio lenguaje especializado, el desafío radica en mantener la precisión técnica sin comprometer la comprensión por parte de quienes no pertenecen a ese campo.
En criminalística y criminología, los tecnicismos juegan un papel indispensable en la descripción precisa de los hechos. Los profesionales utilizan términos específicos para caracterizar elementos como pruebas forenses, reconstrucciones de accidentes o análisis de balística. Sin embargo, cuando estos profesionales actúan en auxilio de la justicia, deben recordar que existe un derecho fundamental de los ciudadanos a comprender los documentos que se presentan en su contra o en defensa de sus intereses (Red de Lenguaje Claro Argentina)
Es por ello que muchos informes incluyen un glosario, donde se explica de forma accesible el significado de los términos técnicos, permitiendo que cualquier persona pueda entender el contenido del informe sin necesidad de poseer un conocimiento especializado (Guía – Poder Judicial de la Provincia del Chaco).
El lenguaje claro está vinculado directamente con los derechos fundamentales consagrados en la Constitución Argentina y la Declaración Universal de los Derechos Humanos. El artículo 16 de la Constitución Argentina establece que todos los habitantes son iguales ante la ley, y no debe haber prerrogativas o fueros especiales. En este contexto, el lenguaje claro es una herramienta para garantizar que todos puedan acceder a la justicia sin ser discriminados por no comprender el lenguaje técnico utilizado en los informes.
Asimismo, de la Declaración Universal de los Derechos Humanos subrayan el derecho de todos los individuos a ser escuchados públicamente y en igualdad de condiciones ante la ley. Estos principios refuerzan la necesidad de que los informes judiciales, particularmente aquellos que incluyen pericias criminalísticas, sean comprensibles y accesibles para todos (Guía de PJ_Chaco).
Uno de los mayores desafíos para los peritos judiciales es encontrar un equilibrio entre el rigor técnico y la claridad comunicativa. Si bien el lenguaje técnico es esencial para la precisión, no debe comprometerse el derecho de las partes involucradas a comprender las conclusiones del informe. El uso de notas al pie, glosarios y explicaciones contextuales son algunas de las herramientas que pueden facilitar esta tarea .
El uso del lenguaje claro en los informes judiciales ofrece múltiples beneficios:
- Acceso a la justicia: Al reducir las barreras lingüísticas, se asegura que todos los ciudadanos tengan acceso pleno a la información y puedan participar activamente en su defensa.
- Mayor transparencia: Un lenguaje claro fomenta la transparencia y evita malentendidos o interpretaciones erróneas de los hechos peritados.
- Mejora en la calidad del servicio judicial: Un informe claro es más fácil de interpretar y discutir en un tribunal, lo que agiliza el proceso judicial y permite una resolución más rápida y justa de los casos.
El lenguaje claro en pericias judiciales es clave para garantizar la comprensión y acceso equitativo a la justicia
- Claridad en los tecnicismos: Es importante que los tecnicismos que resulten imprescindibles vayan acompañados de explicaciones breves y claras. La implementación de un glosario en los informes judiciales es una práctica recomendada que permite a los lectores no especializados comprender los conceptos fundamentales.
- Uso moderado de la voz pasiva: El uso excesivo de la voz pasiva puede hacer que el texto sea más difícil de seguir. Se recomienda optar por la voz activa para una mayor claridad.
- Frases cortas y estructuradas: La redacción de los informes debe ser clara y concisa. Las oraciones largas y complejas deben evitarse, ya que dificultan la comprensión. Los informes deben presentar los hechos de manera organizada, con un flujo lógico que guíe al lector a través de las conclusiones del perito.
El uso del lenguaje claro en los informes judiciales no es solo una recomendación estilística, sino un derecho fundamental para asegurar que los ciudadanos accedan plenamente a la justicia. Los profesionales de la criminalística y criminología deben adoptar este enfoque en sus pericias judiciales, equilibrando la precisión técnica con la claridad para garantizar que todos los actores involucrados comprendan el contenido de los informes. De este modo, se contribuye no solo a una justicia más accesible, sino también a una sociedad más equitativa y transparente.
